lunes, 12 de mayo de 2014

Higgs y Thatcher


Sí, han leído bien. Son los apellidos de las personas que se están imaginando. El científico británico Peter Higgs (1929) y la también británica, la política Margaret Thatcher (1925-2013). Así que el Hombre del bosón y la Dama de hierro del siglo XX, van de la mano en este enroque bloguero del XXI.

Increíble por sorprendente, pero cierto de toda certeza. Estarán conmigo que la historia que les traigo de la pareja, vista así, tiene muy buena pinta. Otra cosa es que yo se la sepa contar bien.


Para empezar, y en puridad, vaya por delante que es cierta sólo en lo esencial. Quiero decir que combina ciencia y política.

Por lo demás, la señora Thatcher es su protagonista principal aunque, eso sí, sin participar personalmente en ella. Y tampoco aparece en ella Higgs, en persona digo. Lo hace su apellido, que da nombre a la mediática partícula: el bosón de Higgs.

Es decir que visto ahora, el título es lo más parecido a una realidad virtual.

Porque lo cierto es que la historia sí tiene dos protagonistas que participan en la trama. Dos que, mire usted por donde, son también un científico y un político, sólo que estos no llegaron a ser tan populares porque...

Pero creo que lo estoy complicando. Mejor será que empiece por donde se debe. Por el principio.

Recordarán que al final de la última entrega, ¿Qué es el campo de Higgs?, les hablaba de otra explicación más divulgativa, para algo tan complejo como son el mecanismo y el bosón de Higgs.

Una especie de modelo para que lo pudiéramos entender hasta los legos. Bueno pues ya está aquí.

Recordando que es gerundio
Seguro que muchos de ustedes saben lo que les voy a decir a continuación, de modo que les presento mis disculpas por la iteración, si es el caso.

Nos encontramos de lleno en el campo de la Física de partículas elementales, que son aquellas que no están formadas por otras más simples, es decir, que no se pueden dividir. De dichas partículas elementales conocemos dos grandes grupos o categorías: fermiones y bosones.

Los fermiones. Que vienen a ser los ladrillos con los que está construido el universo, son indivisibles y, entre los diferentes tipos que existen, los más comunes son los electrones (1897) y los quarks -dentro de estos los up, arriba (1969) y los down, abajo (1995). Los fermiones son las partículas que constituyen la materia tal como la percibimos. Son partículas de materia entre las que se encuentran también los neutrinos, el muón y el tau.

Y los bosones. Que serían el cemento que une a los ladrillos -siguiendo con el símil de la construcción-, también indivisibles como los fermiones y de los que conocemos cinco tipos: fotón, gluón, bosones W y Z, gravitón y bosón de Higgs.

Son partículas asociadas no a la materia, como los fermiones, sino a las cuatro (4) interacciones existentes en la naturaleza (electromagnética, nuclear fuerte, nuclear débil, gravitatoria) y al mecanismo que permite explicar que dichas partículas adquieran masa. Son partículas de interacción o fuerza.

El fotón, partícula responsable del electromagnetismo, transmisor de lo que conocemos como luz. El gluón, asociado a la interacción nuclear fuerte y quien mantiene unido el núcleo (1913) de los átomos (1805), constituidos por protones (1932) y neutrones (1949); el gluón es el pegamento de los quarks, para que me entiendan.

Los bosones W y Z, relacionados con la interacción nuclear débil y causante de la radiactividad y desintegración de los átomos. Y el gravitón, ligado a la gravedad, e hipotética partícula responsable de su transmisión. Aún no ha sido hallada.

Un problema de calado éste, que ya veremos a dónde nos lleva. Precaución.

Precaución, les decía. Y paciencia, les digo ahora. No tenemos la menor idea de por qué razón o razones, no podemos encontrar el gravitón y, por ende, qué puede implicar ese no hallazgo.

Si se trata tan solo de una limitación técnica y tecnológica, lo que supondría el mal menor. (Continuará)






1 comentario :

Anónimo dijo...

Buena continuación de la serie sobre el bosón de Higgs.
Espero que dure.