sábado, 13 de octubre de 2012

ESTATUA de CRISTÓBAL COLÓN (y 2)


(Continuación) Pero si queremos ser justo, desde el punto de vista de la ciencia, esta solución del problema no es correcta. No voy a decir que Colón hiciera trampa, no. Pero sí que escogió la salida más fácil para el huevo que tenía en su mano.

Cascándolo no puso ese huevo en pie, ya que al golpearlo varió su forma y lo transformó en otro distinto. Cascado era ya otro huevo, con otra forma.

Un matiz importante a tener en cuenta, desde el punto de vista de la ciencia. No crean.

Y es que la esencia del problema equilibrista está, precisamente, en la forma ovoide del cuerpo. Colón resolvió el problema para el nuevo huevo cascado, pero no para el huevo entero original.

Entonces, ¿se puede poner un huevo de pie sin hacerle nada? ¿Qué dice la ciencia al respecto?


El huevo de Colón, otras lecturas científicas
Pues dice que sí. Que se puede resolver, sin cambiar en absoluto la forma del huevo. Y como prueba de ello les traigo un par de respuestas.

Ambas pertenecen al campo de conocimiento físico conocido como Mecánica, sólo que una al apartado de la Estática y otra al de la Dinámica de rotación.

Esto que les digo, analizado desde el punto de vista teórico porque, desde el práctico, las dos tienen otra característica en común. Comparten la necesidad de que el experimentador posea una buena ración de paciencia. Verán por qué.

Empecemos por la solución al equilibrio estático. Dadas las superficies, más o menos, irregulares que muestran, tanto la cáscara del huevo como la mesa en la que se va a apoyar, cualquiera comprende que es cuestión de pulso y tiempo, conseguir que uno de ellos mantenga la vertical.

Personalmente lo he probado con una docena de huevos (no todos sirven para el propósito), y he llegado a poner uno en pie, tras varios intentos. O sea que no es imposible, aunque sí poco probable. Ya conocen las fuentes históricas.

Pero desde el punto de vista de la ciencia, es tan solo una lógica cuestión de matemática estadística, de probabilidades.

Para los intereses de la siguiente respuesta, les adelantaré que esta solución estática funciona, tanto si el huevo está crudo como si está duro. Un detalle culinario que los datos documentales no aclaran, pero que no hacen al caso.

Y, ahora sí, continuamos con la solución dinámica. La basada en la Dinámica de rotación, que no de traslación newtoniana de nuestros estudios escolares.

Que es cierto se trata de un cuerpo de conocimientos físicos de cierta complejidad teórica, y algo alejado de la cultura media científica de una persona normal. Pero que, en la práctica, tiene un factor a su favor. Forma parte de esa ciencia popular que todos conocemos desde niño.

De pequeños, muchos hemos jugado, o visto jugar, al trompo o peonza. Seguro que sí. Es uno de esos juguetes que han sido o son muy populares, y cuyos funcionamientos guardan una estrecha relación con la ciencia, aunque no lo parezca.

El trompo es un artilugio-juguete que, como todos sabemos, se mantiene de pie durante cierto tiempo mientras, y solo mientras, gire sobre su punta.

Pues lo mismo se puede hacer con el huevo. No hay más que aprovechar esta propiedad que tienen las peonzas, y hacer que el huevo gire alrededor de su eje mayor.

Si lo hacemos girar con los dedos se mantendrá de pie no sólo sobre su extremo romo sino, incluso, sobre su punta. Es cuestión de que lleve la adecuada velocidad angular y ésta no baje de un determinado valor.

Eso sí, hay que practicar. Y por supuesto hacerlo con un huevo duro.

Con uno crudo no se puede hacer ya que, el estado líquido de su contenido hace las veces de freno y no le permite girar. Pero eso, seguro que lo sabe por experiencia.

Es una peculiaridad rotacional que sirve para distinguir, con facilidad, los huevos cocidos de los crudos y que empleamos muchos en la cocina.

En definitiva. Al modo de Colón o sea cascándolo, lo mismo da que da lo mismo crudo que duro. Pero de la forma rotacional, sólo funciona si está duro. Pero esa es otra historia.

La que aquí nos trae hoy nos lleva ahora, a los Reales Alcázares de Sevilla. A un retablo que está en una de sus paredes y donde se puede ver a Cristóbal Colón pintado.

Mejor dicho. Podemos ver una pintura en la que aparece un señor entre otros varios, que podría ser Colón. O eso dicen.


1 comentario :

un sevillano dijo...

me parece de los más sevillano y científico esta serie de entregas sobre Colon. Enhorabuena.