domingo, 7 de agosto de 2011

El baño de Fraga Iribarne

(Continuación) Unos trajes de baño de fibra sintética, si bien no elástica, es lo que se calzaron unos años después, en 1966, el, a la sazón, Ministro de Información y Turismo español Manuel Fraga Iribarne y el embajador estadounidense, cuando se zambulleron en las frías aguas mediterráneas, de la localidad almeriense de Palomares.

El objetivo. Mostrar al mundo, al país y a la población local, que el mar no estaba contaminado y que no había peligro alguno para la salud.

La razón de ese supuesto peligro. La colisión que tuvo lugar en sus cielos entre dos aviones militares de EEUU y que provocó la caída a tierra de cuatro proyectiles con carga nuclear.

El motivo. La supuesta contaminación producida al liberarse en la zona, el plutonio radiactivo de dicha carga.

Para eso se bañaron. Para demostrar que no había peligro. Y lo cierto es que no lo había. No lo había en el agua, que no era la que estaba contaminada.

Otro gallo les hubiera cantado si se hubieran rebozado en la tierra, que sí estaba contaminada por la radiación. Si están interesados en la historia me lo hacen saber y se la cuento otro día. Tiene hasta una película basada en ella.

Pero por ahora sigo con lo que me trae. Aparco la física nuclear y vuelvo a la química inorgánica. Continúo con la lycra biquinera. (Continuará)


2 comentarios :

Antonio Díaz dijo...

DEbería desarrollar este tema que tiene relación con España

Anónimo dijo...

¿Dónde se pueden ver las citas que pone en la cabecera?
Me parecen de lo más curiosa.